martes, 20 de febrero de 2007

Anquincila


Hay un mundo de espinas, sol y roca
y arroyos que susurran al humano
lo mezquino del mundo ciudadano
que no sacia, aunque llene la boca.

En ese mundo la cigarra toca
su chirrido, adjetivo del verano;
los cebiles arañan el arcano
del cielo, donde todo desemboca.

Los parches estremecen al varano
que bajo peña sus escamas troca,
si en el coleto se vertió la loca

cordura del sampedro soberano:
cuando su elixir la Unidad invoca
los dos mundos por poco no se tocan.

11 comentarios:

Blopa dijo...

Decí la posta: vos te pegaste un viaje de aquellos...

Rogelio Ferreyra dijo...

Excelente elección la frase final... "por poco no se tocan"... si hubiera estado en otra parte del poema no hubiera sido lo mismo...
Exquisita contrucción, como siempre: muy lindo y fluído el lenguaje.
Debo expresar, no obstante, como siempre, mi objeción a la utopía naturalista y el romanticismo artiubanista...
Bienvenido de vuelta!!

TiTo A. dijo...

No fue la experiencia más fuerte de las varias veces que probé; igualmente, fue compartida con amigos y muy placentera. Oportunamente podemos conversar acerca de dosis, formas de preparación y recomendaciones generales. Es un tema apasionante.

TiTo A. dijo...

Gracias, Rogelio. Sabrás disculpar una exageración producto del estrés postvacacional. Es como decir en un poema de amor que la persona amada es la única belleza del mundo...

48hs dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
48hs dijo...

Debe ser inevitable querer escribir sobre otra cosa.

Me gusta que el adjetivo del verano sea el sonido de una cigarra...me gusta.


(uops borré el anterior)

Kaitos dijo...

Me encantó el chirrido de la cigarra. Los cebiles.

ahhhhh...

Lindo Catamarca. Lindo nuestro norte.

...

Parece que con sus aires le ha inspirado la gracia de los cardones, sus espinas punzantes e inquisidoras...

Con esas bellísimas flores, que tardan una veintena de años en aparecer, lindo sería pensar en una buena metáfora para este sentimiento...

TiTo A. dijo...

Gracias por pasar, Kaitos. Si es que el norte me contagió algo como su gracia, espero desplegar mucha vulnerabilidad cada vez que vaya. Ya se me hace dificil pensar en ir para otros rumbos...
Hay una agaveácea (plantas similares a la yuca) que da flores por primera vez luego de 40 años. Luego muere dejando una colonia de varias decenas de hijas a su alrededor ¡qué metáforas podrían salir de eso!
Tengo mucho interés en leer su blog. Hasta pronto.

Kaitos dijo...

Me parece que mi blog lo decepcionó... me quedé con esa impresión...

Pero sé que es un blog raro... es una gran nube de ideas, un mind-map de palabras que genera textos que a veces tienen sentido, y a veces no. ... Es muy yo.

Saludos

TiTo A. dijo...

Siga siendo muy usted que así va bien, Kaitos; despreocúpese y siga con lo suyo, que mi comentario trata de ser constructivo.

Anónimo dijo...

Me fui a catamarca buscando al san pedro... y termine encontrando a Dios. Fue magnifico... tengo hermosos recuerdos de anquincila...

Saluz, paz, amor y bendiciones!